Un juego para descubrir las emociones en el Aula: El panel de las emociones

El objetivo principal es que los niños/as tomen conciencia sobre las propias emociones y las de los demás así como que sepan identificar aquello que les hace estar tristes, alegres, rabiosos o miedosos.
Es ideal para trabajar en niños/as de 6 a 9 años, aunque se puede adaptar según la edad de los alumnos/as.

No os llevará mucho tiempo, podéis dividir la actividad en 4 sesiones de 1 hora cada una, ¡aunque siempre respetaremos los tiempos de cada grupo!

Vais a necesitar tan sólo un sitio donde colgar el panel (mural, pizarra…), unas láminas de situaciones de la vida cotidiana (las encontráis hechas en #SoyVisual), adhesivo o velcro, cartulinas blancas y lápices de colores.

¿En qué consiste esta actividad?

Primero, dividiremos la clase en 4 pequeños grupos. Con cada grupo se trabajará una emoción básica (alegría, tristeza, rabia y miedo). En caso de hacerlo con niños/as mayores, se pueden añadir emociones (envidia, amor…)
La finalidad es que cada grupo dibuje en unas tarjetas caras que expresen alegría, tristeza, miedo y rabia respectivamente. Para ayudar a elaborarlas, el/la maestro/a lanzará preguntas a toda la clase relacionadas con cada emoción a trabajar.
A continuación os proponemos algunas preguntas:

a) Alegría: ¿qué expresión tiene en la cara una persona que está contenta? ¿Qué hace?, ¿Creéis que a los niños/as les gusta estar contentos? ¿Cuándo os ponéis contentos? ¿De qué color creéis que puede pintarse la “alegría”?
b) Tristeza: ¿Qué expresión creéis que tienen un/a niño/a que está triste? ¿Por qué os ponéis tristes? ¿De qué color podemos representar la emoción “tristeza”?
c) Miedo: ¿Qué expresión tiene una persona a la que acaban de asustar? ¿Qué hace alguien que tiene miedo? ¿Qué situaciones os producen miedo? ¿Cómo podemos encarar el miedo? ¿Alguien no tiene miedo nunca? ¿De qué color podemos representar la emoción “miedo”?
d) Rabia: ¿Qué expresión tiene en la cara o en el cuerpo una persona que siente rabia? Cuando no os dejan jugar a un juego que os gusta mucho, ¿cómo reaccionáis? ¿creéis que a los/as niños/as les gusta sentir rabia? ¿Con que color podemos pintar la cara de “rabia?”

Una vez terminada, pondremos el nombre de la emoción que representa en la parte de debajo de cada una. Juntaremos todas las caras con la emoción representada en una bolsa.
En el mural colocamos varias láminas representando diferentes situaciones cotidianas que signifiquen alegría, tristeza, miedo e ira.
Uno/a a uno/a, los/as niños/as cogerán una tarjeta de la bolsa y la colocarán alrededor de la lámina que le sugiere esa emoción y verbalizándolo. Por ejemplo: Una lámina con varios niños jugando a pelota. El niño o la niña puede colocar la cara de alegría mientras expresa “Me pongo contenta cuando puedo jugar a pelota”.

Una misma lámina puede sugerir diferentes emociones a cada niño/a. Por ejemplo, una lámina con una persona que pasea con un perro, a un/a niño/a puede sugerirle alegría porque le gustan los perros, a otro/a tristeza porque tenía uno y se murió, a otro/a miedo porque le mordió…

El/la maestro/a ha de ir explicando y expresando todo lo que va sucediendo y en el caso que se confunda alguna emoción, reconducir a través de la reflexión y el debate.

Es una actividad muy dinámica y enriquecedora tanto para los alumnos/as como para el maestro/a.

Fuente: el panel de las emociones.

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